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Amor no correspondido ¿Cómo superarlo?

Las experiencias de amor, aún las mejores, siempre tienen una parte en la que se experimenta sufrimiento como por ejemplo cuando nuestra pareja se aleja por algún tiempo, cuando se desata una pelea, con el rompimiento, etc. Pero quizás no hay peor padecimiento que el de un enamorado que es rechazado sin poder siquiera llevarse el recuerdo de un beso, es decir el amor no correspondido. Sin embargo debemos reconocer que aún para aquellos amores no correspondidos, hay maneras de curar las heridas y remendar los corazones.
Amor no correspondido
La doctora María Basile, especialista en psicopatologías y terapeuta familiar de la Universidad de Buenos Aires, explica que «nadie está exento de enamorarse de la persona equivocada y siempre es doloroso no sentirse correspondido».
De acuerdo con la experta, en estas desilusiones es cuando nuestra parte adulta muestra su tolerancia al sentimiento de frustración y su capacidad de aceptar el no del otro. Pero, según explica, frecuentemente se hacen difíciles de manejar cuando nuestra parte infantil es inflexible con la parte adulta (o sea, «yo quiero esto, sea como sea, aunque sufra, o me maltrate….»), y cuando no hubo modelos claros de amor durante la infancia que nos sirvan de «salvavidas psicológicos» para salir a flote.

Antes de acabar el tormento

¿Qué se puede hacer para liberar del dolor a estos corazones atormentados? La psicóloga Samella B. Abdullah recomienda algo elemental: que los hombres y mujeres que padecen un amor perdido se den tiempo y permiso para llorar. 
«Cuando estés triste, debes llorar. Las lágrimas ayudaran a liberar las emociones dolorosas. Debes comprometerte en este proceso limpiador antes de emprender cualquier curación», afirma. 
Por su parte, la doctora Basile asegura que lo primero que debe hacer una persona rechazada es darse cuenta de la condición en que se encuentra y responder sinceramente a las siguientes preguntas: ¿Para qué continúo esta relación? ¿En qué me beneficia y en qué me perjudica?¿Cuál es el costo, en mi vida, de este vínculo?¿En qué me conviene continuar sufriendo?¿Por qué no puedo decir NO a una relación que me hace sentir mal?

Disfrutar, la clave para olvidar

Para especialistas de la mente humana como Basile, se trata de ocupar el tiempo en algún nuevo proyecto, dedicarse al esparcimiento o a salir con amigas/os. En pocas palabras, hacer todo lo que se posterga cuando se está pensando en la pareja y disfrutar del formidable momento con uno mismo.
Ocuparse de mejorar día a día nos prepara además para una mejor elección futura , ya que la experiencia vivida forma parte de un aprendizaje. Otros terapeutas aconsejan escribir un diario para liberar nuestros sentimientos y volver a ellos sólo para reconocer que ya cerró esa herida. 
Abandonarse y someterse a la desesperación poco hará por ti. Peor aún si hablas casi todo el día de él o ella o si, permanente y compulsivamente, pretendes saber de esa persona a través de amistades o de llamadas telefónicas.

Cuando el dolor es demasiado

«Hay que darse cuenta si se trata de una obsesión. Es normal estar triste, angustiado o distraído algunos días. Pero no se puede detener la actividad ni estar con síntomas de insomnio, ansiedad, alteraciones del humor o desorden de la alimentación, durante un tiempo mayor a tres meses aproximadamente. Yo diría que ya un mes es mucho», dice la doctora Basile. 
Y aunque mal de muchos es consuelo de tontos, no cabe más que resignarnos a la idea de que el mal de amores es tan antiguo como el hombre y tiene tanto futuro como nuestra especie misma.
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